lunes, 5 de septiembre de 2011

REFUTANDO LA DOCTRINA DEL DIEZMO



EL DIEZMO GENERALMENTE SE EXIGE A LOS CREYENTES EN CRISTO USANDO TEXTOS BÍBLICOS DESCONTEXTUALIZADOS. CONOZCA LAS RAZONES POR LAS QUE EL CREYENTE NO DEBE DIEZMAR SEGÚN LA LEY YA QUE NO HAY NI UN SOLO VERSICULO QUE PUEDA ESGRIMIRSE PARA SUSTENTAR TAL DOCTRINA.
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3 comentarios:

  1. FAMILIA CRISTAIANA "DIOS DE ALIANZA"5 de septiembre de 2011, 9:34

    ESPERO LO ANALICEN CON DETENIMIENTO Y SI HA DE REFUTAR HÁGANLO SIN OFENSAS Y CON BASE BÍBLICAS.

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  2. maritza25 de abril de 2012, 15:04

    DE LA DOCTRINA DE LA PROSPERIDAD A LA DOCTRINA DEL NO DIEZMO
    PASAMOS DE UN EXTREMO A OTRO

    "Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación". Santiago 3:1
    "Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. 1:7 No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. 1:8 Más si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. 1:9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema" Gálatas 1:6-9
    Jesucristo dijo: "No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. 5:18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido".
    Si acepto lo escuchado, entonces los libros de Moises no me aplican, incluyendo no matarás, no robrarás, etc., porque todos ellos fueron escritos y enseñados al pueblo de Israel, como tampoco me puedo adueñar de todas las promesas que hay en el antiguo testamento, escritas en ese tiempo para el pueblo de Israel como "ninguna arma forjada contra mi prospera" o "El enviara sus ángeles a mi alrededor para que me guarden en todos mis caminos". Recordemos que en Cristo Jesús se rompe la maldición que había sobre nosotros.
    Jesucristo dijo "dad al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios".
    Estudie este versículo: Un hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 18:19 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo Dios. 18:20 Los mandamientos sabes: No adulterarás; no matarás; no hurtarás; no dirás falso testimonio; honra a tu padre y a tu madre.18:21 Él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. 18:22 Jesús, oyendo esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme. Si usted se fija aquí, con Cristo la ley se pone más exigente, pues aquí lo invita a dar toda su riqueza. Usted cree que conociendo Dios el corazón del hombre que es avaro, que no pagamos nuestras deudas, que somos malagradecidos por naturaleza, iba a abrogar este mandamiento, cuando arriba leemos que El no vino hacer eso, sino hacer cumplir la ley. Entonces ¿si Cristo lo predicó, lo practicó, porque usted está enseñando todo lo contrario?
    "Mas ¡ay de vosotros, fariseos! que diezmáis la menta, y la ruda, y toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto os era necesario hacer, sin dejar aquello". Paso usted por alto el ¡Ay! con el que Cristo exhorta a los fariseos. Junto con el diezmo debemos también practicar la justicia y el amor. No se necesita descernimiento para esto. Y es tan importante esto de la justicia que dice "Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos". Toda la enseñanza de Cristo es para judíos y gentiles.

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  3. maritza25 de abril de 2012, 15:05

    Si aceptara lo dicho por usted, entonces que pasa con lo dicho en Gálatas 4:25 “Porque Agar es el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual, pues ésta, junto con sus hijos, está en esclavitud.
    4:26 Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre.
    4:27 Porque está escrito:
    Regocíjate, oh estéril, tú que no das a luz;
    Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de parto;
    Porque más son los hijos de las desolada, que de la que tiene marido.
    4:28 Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa".
    Continuaciòn: O lo dicho por Juan en Apocalipsis “21:2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido".

    Yo por Cristo, soy hija de la promesa hecha por Dios a Abraham, gloria al hacedor de todo por su infinito amor y paciencia para con nosotros.

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